viernes, 25 de junio de 2010

*ACERCA DE LA SANTA INQUISICIÓN…*


Como los inquisidores eran católicos, es evidente que por su causa la reputación de la Iglesia católica ha sufrido mucho en el mundo contemporáneo, tanto más cuanto las historias de la Inquisición, generalmente, han sido escritas y propagadas por sus adversarios

Editó: Lic. Gabriel Pautasso

“Antaño, la palabra “Inquisición” tenía la significación total de “investigación”. Por el contrario, lo que significa ante el mundo moderno es “beatería, intolerancia, crueldad…” Hombres que carecen en absoluto del conocimiento exacto de los fundamentos esenciales de la Fe cristiana están convenciones de que no es posible el quemar a un ser humano porque niegue determinados dogmas con las enseñanzas de Jesucristo y la profesión de su doctrina. Hombre que no logran llegar a un acuerdo a un acuerdo sobre la definición de Dios, y que ni siquiera tienen la seguridad de creer en Él, no vacilan en declarar que no es conforme a la Divinidad el producir dolor o privar de libertad a los que no se  hallan de acuerdo con nosotros. Y como los inquisidores eran católicos, es evidente que por su causa la reputación de la Iglesia católica ha sufrido mucho en el mundo contemporáneo, tanto más cuanto las historias de la Inquisición, generalmente, han sido escritas y propagadas por sus adversarios”.  WILLIAM THOMAS WALSH, “Personajes de la Inquisición”, prólogo, p. 21

* Introducción*
El Rabino BENJAMÍN DE TUDELA, en su célebre “Itinerario”, manifiesta que es magnífica la situación en el mundo islámico, en el siglo XII, con el reinado del Príncipe de la Cautividad, dado su título a los Rabinos y Cantores de la tierra de SINAR o CALDEA, de PERSIA, KHORASSAN, SHEBA, o ÁRABIA FELIX, MESOPOTAMIA, ALANIA, SICARIA, hasta las montañas de ASANA en GEORGIA, tan lejos como hasta el río GIHON, hasta el país del TIBET y hasta la INDIA. Todas las Sinagogas recibían, según el decir del ilustre viajero su permiso para tener Rabinos y Cantores, quienes iban a  BAGDAD para ser instalados solemnemente en su oficio y recibir su autoridad de manos del Príncipe de la Cautividad, llamados por todos HIJO DE DAVID. 

Por el contrario, en el mundo cristiano, en el siglo XII, decía otro destacado del Judaísmo, RABBI KIMHHI: “Estos son los días del exilio en los cuales estamos ahora y no tenemos ni Rey ni Príncipe en Israel, pero tenemos el dominio de los gentiles y de sus Príncipes y Reyes” (JAMES FINN: “Sephardim or the History of the Jews in Spain and Portugal”, Londres, 1841. p. 216-229). En realidad, por los datos que tenemos, el Principio del Destierro tenía jurisdicción solamente sobre las Comunidades hebreas de oriente; las de occidente, aunque en alianza estrecha con las anteriores, estaban gobernadas por sus Consejos Comunales y Sínodos generales de dirigentes, uno de los cuales tuvo lugar TOLEDO. Pero lo que interesante, es la confesión del citado Rabino, al señalar que en el siglo XII, dominaban los judíos a los gentiles (entre los que nos incluyen a los cristianos), a sus reyes y a sus príncipes. Esto era una triste realidad -¡hace más de ochocientos años!– no sólo en oriente, sino también en occidente. El imperialismo Judaico, como lo confiesa el distinguido rabino, había ya hecho progresos crecientes en su labor de dominar a las naciones gentiles (no-judías, no-hebreas). Es verdad que en la Cristiandad, en varios reinos y señoríos, en cumplimiento de los  CÁNONES de la Santa Iglesia, estaba prohibido el acceso a los cargos de gobierno a los israelitas, pero por una parte, algunos monarcas desobedecían los sagrados Cánones y por otra, los que se sujetaban a sus mandatos, no podían impedir que judíos clandestinos, ocultos, secretos, quintacolumnistas, cubiertos con la máscara de la religión católica-cristiana desde generaciones atrás, pudieran infiltrarse mediante una labor bien organizada, dentro de los puestos de gobierno en Francia, Alemania, Italia, Inglaterra y demás países de la Cristiandad, como se introducían también en el sacerdotes seglar y en las Órdenes Religiosas, escalando las jerarquías de la Iglesia. El Judaísmo en esas fechas, tenía pues ya un gigantesco poder invisible, que se filtraba por todas partes, sin que los Papas, los Emperadores y los Reyes (los sucesores de la República) pudieran evitarlo.
Este poder oculto tropezaba sin embargo con serios obstáculos para obtener un dominio rápida del mundo cristiano: 1) la monarquía y la nobleza hereditarias, en el título se heredaba al primogénito, dificultaba la tarea de que de que los judíos secretos pudieran escalar rápidamente la jefatura suprema del Estado. Podían ganarse la confianza del rey, llegar a Ministros, pero les era casi imposible llegar a reyes. En 2), su posición en el gobierno real era algo inseguro y estaban expuestos a ser destituidos cualquier día por el monarca que los nombraba, viniéndose abajo un dominio alcanzado después de muchos años de preparación y de esfuerzo. 
Por otra parte, los príncipes de sangre real sólo podían casarse con princesas de sangre real, por lo que las jefaturas de los Estados estaban salvaguardadas con una muralla de sangre, que hacía imposible o casi imposible el acceso de los plebeyos al trono.  En tales condiciones, por más que se pudieran infiltrar  los hebreos, en algunos casos excepcionales, lograron perforar esa muralla de sangre aristocrática, lo cual fue un desastre para la sociedad cristiana, pues con sus matrimonios mixtos, celebrados con personas de la nobleza, pudieron escalar valiosas posiciones, desde los cuales apoyaron sus cimas o sus revoluciones.
Pero la aristocracia de la sangre, era sobre todo en algunos países una casta cerrada y difícil de perforar por los plebeyos, por lo que, para infiltrarla y controlarla, por ejemplo en Inglaterra, necesitaron los israelitas una labor de varios siglos. En cambio,  en otros lugares como ITALIA, ESPAÑA y FRANCIA, lograron en algunas épocas grandes progresos con su penetración en la aristocracia, pero la INQUISICIÓN les echo abajo sus conquistas, que se vieron reducidas grandemente. Sin embargo, en los siglos XVIII y XIX, fueron suficientemente poderosas para facilitar el triunfo de las revoluciones masónico-liberales que derrocaron a las monárquicas fundadoras.
En cualquier forma, la nobleza presentaba una barrera de la sangre que en muchos países estorbó la infiltración de los hebreos a las altas esferas de la sociedad europea. La monarquía hereditaria, presentaba el obstáculo principal para que los judíos, disfrazados de buenos cristianos pudieran escalar la jefatura del Estado.
Aunque cada vez que pudieron intentaron infiltrarse en la realeza, en casi todos los casos fracasaron, con excepción de Etiopía, en donde lograron colocar una dinástica judaica y de Inglaterra, en donde dicen que ya judaizaron a la realeza.
Es pues comprensible que los israelitas del siglo XII no quisieran esperarse a que fructificara una larga y desesperante labor de siglos, consistente en la infiltración progresiva en las dinastías reales y aristocráticas; por eso, sin dejar nunca de intentarlo, idearon no obstante un camino más rápido para lograr el objeto deseado: la destrucción revolucionaria de las monarquías hereditarias y de la aristocracia de la sangre y la substitución de esos regímenes por Repúblicas, en que los judíos pudieron escalar sin dificultad y brevemente la jefatura de los Estados. Por ello es de tanta importancia la revolución organizada en ROMA por el judaico GIORDANO PIERLEONI, que alcanzó con rapidez la jefatura máxima de la pequeña República. Aunque esta revuelta no fue dirigida contra un rey, al dar este golpe de mano y colocarse en unos cuantos días en la cúspide del poder, el hermano del Antipapa judío había puesto la muestra al Judaísmo universal, enseñándole cómo perforar y destruir en breve plazo esa barrera de la sangre constituida por la monarquía hereditaria. En algunas herejías de la Edad Media, además de la Reforma de la Iglesia, ya se proyectaba el derrocamiento de los monarcas y el exterminio de la nobleza; y en los tiempos modernos, lo han venido obteniendo, enarbolando la bandera de la democracia y DE LA ABOLICIÓN DE LAS CASTAS PRIVILEGIADAS.  
Sin embargo, ese querer alcanzar tantas metas de un golpe, sólo logró en el Medievo, unir a los reyes, a la nobleza y al clero, que mientras permanecieron unidos, hicieron fracasar los intentos revolucionarios del Judaísmo. Ante esos fracasos acabaron por comprender que no era posible lograr de una sola vez tantos y tan ambiciosos objetivos. Los hebreos han tenido la gran cualidad de aprovechar siempre las lecciones del pasado; por ello, en su nueva revolución que empezó en el siglo XVI, ya no atacaron al mismo tiempo a los reyes, a la nobleza y al clero, sino que por el contrario, trataron primero reformar y dominar a la Iglesia CON AYUDA DE LOS MONARCAS Y DE LOS ARISTOCRACIAS, para después, mediante nuevos movimientos revolucionarios, derrocar a éstos. 
Otro obstáculo que estorbaba el rápido dominio de los pueblos cristianos por los criptos-judíos, lo constituía la Santa Iglesia, con su clero, sus jerarquías y sobre todo sus Órdenes Religiosas. Es comprensible que para los falsos cristianos, judaizantes en secreto, fuera un verdadero sacrificio infiltrarse  en el clero, máxime si se trataba de las Órdenes Religiosas, sin tener una verdadera vocación religiosa, sólo con el objeto de controlar las jerarquías de la Iglesia y preparar du ruina. Si lo hicieron y lo siguen haciendo, es porque tienen una mística y un fanatismo paranoicos, pero es indudable que una solución más rápida y que implicara menos sacrificios, tenía que ser vista por ellos como preferible. Ante la imposibilidad de destruir a la Iglesia, dado su arraigo en el pueblo, optaron por intentar su Reforma revolucionaria por medio de los movimientos heréticos,  mientras era posible realizar su completa destrucción, por ello las sectas heréticas que organizaron los judíos secretos desde la Edad Media hasta nuestros días, entre otros objetivos tendieron siempre los siguientes

1) 
Supresión en primer término de las órdenes monásticas, cuyo voto de pobreza,  vida en comunidad, dura regla y dificultad de satisfacer en ellas en apetito sexual, obstaculizaba mucho la infiltración. Como nos demuestran documentos incontrovertibles, entre ellos los procesos inquisitoriales los cripto-judíos en diversas épocas llegaron a realizar peligrosas penetraciones, los cripto-judíos en las ÓRDENES MONÁSTICAS que más les interesaba infiltrar, como lo fueron en un tiempo los dominicos, y los franciscanos y posteriormente los jesuitas, además de algunas otras, demostrando los judaizantes ser capaces, como los cristianos, de los mayores sacrificios por su causa. Pero es indudable que para el judaísmo subterráneo y clandestino,  lo más cómodo era destruir estas difíciles barreras, logrando en una forma u otra la disolución de la Órdenes Religiosas.
2)  Supresión del celibato de los clérigos. Aunque los procesos de la INQUISICIÓN nos demuestran que los clérigos cripto-judíos se han dado siempre sus mañas, con ayuda de sus correligionarios, para tener su mujer clandestina o para introducir al clero cristiano jóvenes cripto-judíos de tendencias homosexuales que no tuvieron ese problema, para el Judaísmo subterráneo cubierto con la máscara del Cristianismo, era mucho más cómodo realizar una reforma revolucionaria de la Iglesia, que suprimiera el celibato de los clérigos. Por ello, siempre que pudieron hacerlo en un movimiento herético, abolieron dicho celibato. 
3)  Supresión de la jerarquía de la Iglesia. La actual jerarquía es difícil de escalar; y si bien es cierto que los judíos quinta-columnistas han llegado hasta la cúspide, también lo es que esa labor ha sido siempre dificilísima y tardada. La Santa Iglesia ha ido acumulando con el tiempo defensas naturales en sus propias instituciones; por eso, en los movimientos heréticos medievales y del Renacimiento, que los judíos secretos controlaron, suprimieron la jerarquía eclesiástica, substituyéndola por Consejos de Presbíteros (¡soviets!) y por una democracia religiosa.  
Pero en la Edad Media y después en tiempos de los cripto-judío CALVINO y ZWINGLIO, la situación era distinta; entonces para dominar rápidamente las Iglesias Cristianas, el mejor camino era el de la supresión revolucionaria de la jerarquía eclesiástica, porque así, cualquier cripto-judío se elevaba de golpe a la jefatura de la Iglesia, sin tener que pasar por el larguísimo e incierto proceso de ir escalando los grados desde Presbítero, Canónigo, Obispo, Arzobispo, Cardenal, Papa, como ha sido costumbre en la Iglesia desde hace varios siglos.
Pero los judíos clandestinos, ciertamente estaban en posibilidad de lograr tales objetivos. Igualados por el bautismo con los demás habitantes de la región, su Judaísmo subterráneo, trasmitido de padres a hijos, de una generación a otra, se había ido haciendo más oculto, hasta que ya en el siglo XI, era imposible percibirlo en los Estados Cristianos, en donde existía un Judaísmo secretísimo de muchas familias que aparecían como cristianas de generaciones atrás, algunas de las cuales, aunque en escaso número, habían logrado incluso conservar los títulos de nobleza adquiridos en la forma que ya se ha analizado. La inmensa mayoría de estos judíos secretos, pertenecía a una nueva clase social que iba surgiendo: la burguesía, en la cual eran sin duda el elemento más poderoso y sobre todo el mejor organizado y más rico. Por ello no puede considerarse como coincidencia el hecho de que a medida que la burguesía iba creciendo en poder, el Judaísmo fuera también aumentando sus posibilidades de dominar a los pueblos. Para entender la fuerza decisiva que los judíos tenían en la burguesía medieval, es preciso tomar en cuenta que nos casos monopolizaba el comercio y en otros casos desempeñaban un papel capital en el control del mismo, de la Banca y de los  préstamos usurarios.  Al mismo tiempo, en el terreno de la artesanía, los hijos de Israel representaban un elevado porcentaje. 
4)  Un asunto que molestaba mucho a los judaizantes cubiertos con el disfraz del Cristianismo, era culto obligado que tenían que rendir a las imágines de CRISTO, MARÍA SANTÍSIMA y DE LOS SANTOS. Eso de tener que ir con frecuencia a Iglesias llenas de imágines, era de lo más repugnante para los cripto-judíos, tanto por sus convicciones religiosas que consideraban que consideraban idolátrica esta clase de culto, como el odio que tienen a MARÍA SANTÍSIMA y a los SANTOS, sobre todo a aquéllos que se distinguieron como caudillos antisemitas. Lo más odioso para estos falsos cristianos, era verse obligados a tener sus propios hogares llenos de imágines para no inspirar sospecha a sus vecinos y amigos cristianos. Por ello, una forma de cristianismo que suprimiera el culto de las imágines, era para los hebreos subterráneos mucho más cómodo y siempre que pudieron, abolieron en sus movimientos heréticos el culto a las imágines. Sin embargo, hay casos de Iglesias cristianas, ya controladas por ellos, en que no pueden todavía realizar tal cosa para no herir los sentimientos del pueblo, pero creemos con fundamento que lo harán en cuanto en cuanto puedan hacerlo sin perder el control de las masas.
5)  Otro los objetivos de la acción cripto-judía en la sociedad cristiana, era suprimir lo que ahora se llama ANTISEMITISMO, porque comprendían que mientras los cristianos estuvieran conscientes del peligro que los hebreos significaban para ellos, para la Santa Iglesia y para las naciones cristianas, estarían en posibilidad de defenderse mejor de la acción conquistadora del imperialismo judaico y se provocarían a menudo, como se provocaron, constantes reacciones defensivas que seguirían haciendo fracasar, como hasta esos momentos,  las empresas de dominio  realizadas una y otra vez por la SINAGOGA. En cambio, si la Santa IGLESIA y los fieles perdían la noción de ese peligro, tendrían menores posibilidades de defenderse de su acción dominadora. Por eso, desde los movimientos heréticos cripto-judíos del primer milenio y sobre todo en los de la Edad Media, se nota una tendencia a lograr la transformación de la mentalidad de los cristianos y de los dirigentes de la Iglesia y del Estado, intentando cambiar su anti-judaísmo, plan que dio origen a esos constantes movimientos pro-judíos organizados por la quinta columna hebrea introducida en la sociedad cristiana y en el clero de la Iglesia. 
6)  Vemos pues surgir en muchas herejías medievales defendidas con ardor por muchos de los más distinguidos heresiarcas de estirpes israelita, fenómeno que se repitió en diversas sectas protestantes de origen unitario, o Calvinista en los siglos XVI y XVII, sectas que fueron denunciadas por las INQUISICIONES ESPAÑOLA y PORTUGUESA, como empresas controladas secretamente por los judíos ocultos bajo el disfraz del Cristianismo. ¿Pero cómo lograr todo lo anterior, si la doctrina de los PADRES DE LA IGLESIA, DE LIS PAPAS, DE LOS CONCILIOS ECUMÉNICOS y PROVINCIALES y de los PRINCIPALES SANTOS DE LA IGLESIA, CONDENABA EN DIVERSAS FORMAS A LOS JUDÍOS? ¿Y tenía que ser acatada por los fieles CRISTIANOS? Los conspiradores israelitas solucionaron este problema cortando por lo sano e incluyendo en el programa de sus movimientos heréticos, el desconocimiento de la TRADICIÓN de la Iglesia como fuente de la revelación, y  sosteniendo que la única de la verdad revelada era la Sagrada Biblia. Esta guerra a muerte contra la TRADICIÓN , la renovaron los clérigos cripto-judíos, es decir, los dignos sucesores de JUDAS ISCARIOTE, cada vez que pudieron, en repetidas ocasiones desde el  siglo XI hasta nuestros días, con una perseverancia digna de mejor causa; hasta que lograron sus primeros éxitos en la REFORMA PROTESTANTE. Con esa encarnizada lucha contra la TRADICIÓN de la IGLESIA, lo que siempre han pretendido el Judaísmo y sus agentes infiltrados en el clero. (¿O ACASO Ud. piensa que se trata de la CIA, de los chinos comunistas, el MI 5, la Mossad, el SIDE, tutti quanti?), ha sido echar abajo la doctrina anti-judía de los Padres, de los Papas con GREGORIO IX y INOCENCIO III y tantos…y de los SANTOS CONCILIOS de Nicea… para poder hacer prevalecer en la cristiandad, tesis filo-judíos, que faciliten a la SINAGOGA DE SATANÁS, el dominio tanto de la IGLESIA como de los  pueblos cristianos. En todo esto coinciden asombrosamente, todas las SECTAS HERÉTICAS DE ORIGEN JUDAICO QUE SURGIERON ENTRE LOS SIGLOS XI y XXI.  Por otra parte, como en la Liturgia y en los ritos de la Santa Iglesia, fueron incluidos frecuentemente alusiones a la “PERFIDIA JUDAICA”, el “CRIMEN DEL DEICIDIO”, etc., para que los clérigos tuvieran un constante y frecuentes recordatorio de la peligrosidad del enemigo CAPITAL y estuvieran listos para defender a sus ovejas de las acechanzas del más feroz de los lobos, lo primero que ha hecho una herejía de este tipo, ha sido suprimir de la Liturgia y del Ritual todas esas alusiones contra los hebreos, cosa que es ciertamente muy significativa. Quitando a la sagrada tradición toda autoridad como fuente de la verdad revelada, ya sólo quedaba como tal la Sagrada Biblia, y aunque el Nuevo Testamento tiene repetidas alusiones a la maldad hebraica, ya lo único que restaría a los hebreos, era intentar la falsificación de los Santos Evangelios suprimiendo en ellos los conceptos ingratos a los oídos israelitas y aunque parezca increíble, en algunas sectas heréticas, han llegado al extremo de realizar verdaderas falsificaciones de los pasajes del Nuevo Testamento, alegando que la VULGATA es una biblia APÓCRIFA, QUE FALSEA EL CONTENIDO DE LOS DOCUMENTOS ORIGINALES.
6bis). Otro de los objetivos propuestos, con el cambio de ideología de los cristianos, de un antisemitismo existente por siglos, al filo-semitismo, fue el obtener la derogación de todas las leyes civiles y canónicas que dificultaban la acción de los judíos,  para lograr su dominio sobre los pueblos, especialmente de los hebreos, que vivían y viven identificados como tales, es decir, de los judíos públicos. En ese sentido, quienes podían obtener lo que ellos han llamado liberación de estos últimos, tenían que ser los judíos clandestinos,  que al lograr por medio de infiltración o de revolución controlar los gobiernos cristianos, podían derogar las leyes que impedían a sus hermanos hebreos, practicantes en público de su secta, participar en el dominio de las naciones cristianas o gentiles. En la EDAD MEDIA, los judíos subterráneos, obtuvieron algunos éxitos aislados y fugaces; y sólo a partir del siglo XVIII con la ayuda de la FRANCMASONERÍA,  pudieron emancipar a sus hermanos los judíos públicos. 
7)  Otra de las aspiraciones máximas de los hebreos ha sido adueñarse de las riquezas de los demás pueblos. Por medio de la USURA , lograron durante de la EDAD MEDIA alcanzar en parte esta meta y acumularon gigantescas riquezas con los más despiadados despojos. Hasta en algunas herejías medievales de origen hebreo, se predica ya el comunismo, la abolición de la propiedad privada, y la expropiación general de los bienes de la Iglesia, la nobleza, la realiza y la burguesía
COMPRENDIERON que no era posible vencer a todos sus enemigos al mismo tiempo; y en los siglos posteriores, prefirieron ir realizando por partes su gran revolución, dividiendo incluso el campo el campo contrario y aprovechando una parte de él, para lanzarla contra la otra, hasta conseguir poco a poco, pero con paso más seguro, todo sus propósitos. Pero estos fines siniestros (izquierda) DE LA REVOLUCIONES JUDAICAS, han sido cuidadosamente ocultadas a las masas, a las que se ha engañado siempre con programas muy atractivos,  capaces de arrastrarlas haciéndoles creer que la herejía o revolución, es un movimiento surgido del mismo pueblo (masa), PARA BENEFICIARLO, para establecer la democracia y la libertad, para suprimir los abusos y las inmoralidades de los clérigos o de los gobernantes civiles, purificar la Iglesia o el Estado, acabar con la tiranía y la explotación y hasta convertir EN UN PARAÍSO ESTA TIERRA. Los caudillos cripto-judíos (desde LENIN, TROTSKY, STALIN hasta los recientes FIDEL CASTRO RUZ, CHAVEZ, ORTEGA y tantos) siempre han sido maestros del engaño; arrastran tras de sí al pueblo un bello programa mientras que en secreto planean realizar algo muy distinto. Esta hábil estratagema ha sido siempre otra de las claves de las claves del éxito de los heresiarcas y de los caudillos revolucionarios hebreos. El hecho universal de que los israelitas, cubiertos bajo la máscara del Cristianismo o de otra religión, estén diluidos en el pueblo, usando sus mismos nombres y sus mismos apellidos, sin que nadie sospeche que son judíos, es decir extranjeros que están en plan de conquista, ha hecho aparecer sus herejías o sus movimientos revolucionarios como salidos del mismo Pueblo. Es cierto que el la Edad Media todavía se recordaba (Historia magíster vitae est) el origen hebreo, próximo o lejano de muchos falsos cristianos, lo cual permitió a clérigos, monarcas y aristócratas, localizar el origen judío de estas revueltas y de estas sectas, pero a medida que los siglos pasaron, se fue olvidando el origen de tales familias, que por otra parte hicieron todo lo posible para se borrara el recuerdo o la memoria, AHORA SI, de su ascendencia judía, hasta que en buen día ya nadie que bajo la apariencia de un piadoso cristianismo, se ocultaba un judío subterráneo que conspiraba (conspirar juntos) CONSTANTEMENTE contra la Iglesia y el Estado y que no desaprovechaba oportunidad para organizar revueltas y conspiraciones, las cuales, en tale circunstancias, aparecen como surgidas del propio pueblo y como meras luchas intestinas (guerra civil) entre miembros de una misma nación o familias, siendo que en realidad son verdaderas GUERRAS sostenidas por un pueblo invadido en la peor forma, contra invasores extranjeros muy bien disfrazados, dispuestos a conquistarlos, utilizando para ello a una gran parte del mismo pueblo, atrapada en las redes de los quinta-columnistas mediante hermosos planes revolucionarios, programas bellísimos con los cuales hacen creer a las futuras víctimas que al apoyarlos están trabajando por su propio mejoramiento y están luchando por la superación de sus instituciones políticas, sociales o religiosas. Este ha sido el gran engaño de todos los movimientos subversivo cripto-judíos desde el siglo XI hasta nuestros días; y ésta también ha sido otra de las causas de los triunfos de los falsificadores y timadores israelitas, disfrazados con la apariencia de sinceros redentores del pueblo, salvadores de la nación o reformadores de las Iglesias. Iniciar una revolución con los fines y objetivos para luego conducirla hacia los propósitos más perversos, ha sido siempre la táctica TRADICIONAL  del Judaísmo desde hace novecientos años o mil años. Naturalmente que algún día, los incautos atrapados, por los caudillos embusteros y por los tan atractivos como falsos programas, se den cuenta del criminal engaño, pero en ocasiones esto ocurre cuando las cosas ya no tienen remedio y cuando los engañados están prácticamente aniquilados o esclavizados, sufriendo las graves consecuencias de su ingenuidad. Si analizamos los casos de los heresiarcas medievales, comparándolos con los de los caudillos cripto-judíos revolucionarios o judíos públicos de los tiempos modernos y contemporáneos, nos encontramos con frecuencia frente a hombres y mujeres que han sabido hipócritamente o falsamente rodearse de tal aspecto de bondad y sinceridad, de tal aureola de santidad, que cualquiera que no conozca a fondo las fábulas judaicas, acabará por creer que está realmente ante un verdadero apóstol, cuando que en realidad, se trata de esos falsos Profetas Y FALSOS APÓSTOLES, contra los cuales tanto nos previnieron CRISTO NUESTRO SEÑOR y SAN PABLO, conocedores mejor que nadie de lo que era capaz la hipocresía judaica. A esto debe añadirse, que la pandilla o mafia cripto-judía que los apoya, sabe echarles incienso hasta consolidar su buena fama y prestigio personal, convirtiéndolos en verdaderos fetiches que se ganan el respaldo incondicional del pueblo y que luego utilizan su influencia en beneficio de los planes judaicos de dominio y sus empresas subversivas. EN LOS PROCESOS DE LA INQUISICIÓN ESPAÑOLA Y PORTUGUESA, suele verse cómo los cristianos nuevos, judaizantes solían darse prestigio unos a otros para elevarse y ejercer dominio sobre los cristianos viejos (españoles de sangre visigoda y latina-romana) y cómo lograban incluso que se tuviera como muy buenos católicos, y hasta como santos, a hombres y mujeres, que siendo judíos clandestinos, maldecían en secreto a la Santa Iglesia. 
En pocas palabras acabamos de sintetizar lo que podríamos llamar la quintaesencia de los movimientos revolucionarios hebreos del siglo XI en adelante, hasta nuestros días. QUIEN anhele profundizar en este tema y conocerlo a fondo, debe hacer un estudio en los Archivos, tanto de la INQUISICIÓN PONTIFICIA MEDIEVAL como de las INQUISICIONES ESPAÑOLA y PORTUGUESAS que en otro lugar enumeramos, ya tales instituciones, lograron penetrar en los secretos más recónditos del Judaísmo subterráneo y de los movimientos herético revolucionarios que organizó en la sombra, dado que las INQUISICIONES contaban con medios para hacer hablar hasta a los judíos más herméticos y obligarlos a revelar sus grandes secretos. Además utilizaban otra serie de sistemas muy útiles para lograr eficazmente tales propósitos.
Entre tales sistemas se contaba, la aplicación del tormento. Si la INQUISICIÓN descubría a un judío secreto, era conducido por los frailes inquisidores a la cámara del tormento, y obligado los nombres de todos los falsos cristianos que eran judíos en secreto. Los suplicios aplicados eran tan eficaces, que la gran mayoría de los varones y desde luego, todas las mujeres, negando en un principio; al ordenar los monjes inquisidores que se aumentara el tormento, empezaban a revelar algunos nombres de otros cristianos cripto-judíos; y un aumento mayor de la tortura, acababan denunciando todo lo que sabían sobre los secretos del judaísmo subterráneo, sus jefes ocultos y las personas que a él pertenecían. Una vez que los inquisidores obtenían estas denuncias, mandaban encarcelar a todos los denunciados, y aplicándoles el tormento, obtenían de ellos más datos sobre jefes, miembros y ramificaciones de la organización ultra-secreta del judaísmo clandestino. Denunciados más nombres y ramificaciones, se hacían nuevas redadas, hasta copar totalmente, toda la organización oculta del judaísmo, y sus infiltraciones en el gobierno, en el ejército, en el clero, etc.
A los muy escasos conversos sinceros, la INQUISICIÓN les pedía que fingiera seguir siendo leales al judaísmo, para que quedándose como miembros de las organizaciones secretas de éste, estuvieron informando a la INQUISICIÓN datos valiosos sobre las ramificaciones más secretas del judaísmo subterráneo; pero cuidándose las INQUISICIDORES de los falsos confidentes que pudieran dar datos falsos, acusando de ser judías a personas que no lo fueran.
LA INQUISICIÓN ESTUVO EN DIVERSAS OCASIONES DE DESTRUIR POR COMPLETO A LA QUINTA COLUMNA JUDÍA en tal o cual Estado cristiano, pero los israelitas lograron hacer fracasar estos éxitos a punto de lograrse, moviendo a compasión a los PAPAS o a los REYES para que, cuando ya estaban descubiertos y presos, los judíos clandestinos de una región o país, decretaran un perdón general, que echara abajo el trabajo difícil y laborioso logrado  por los clérigos inquisidores. En otras ocasiones organizaban campañas de calumnias contra  éstos, hasta obtener que se desbaratara, la obra de algún celoso y eficaz inquisidor. Pero lo que fue decisivo en el triunfo judaico sobre la INQUISICIÓN, fue que lograron que se estableciera, que la primera vez que fuera descubierto que un cristiano practicaba el judaísmo en secreto, podía obtener el perdón de su vida con sólo arrepentirse y pedir perdón; siendo condenado a la hoguera, solamente si después de reconciliarse con la Iglesia, era descubierto practicando de nuevo el judaísmo, llamando como hemos visto, la herejía judaica. Lo que ocurrió es que la inmensa mayoría, después de salvar la vida tan fácil, tomaban excesivas precauciones, y evitaban ser de nuevo descubiertos. LA BONDAD DE LOS PAPAS Y DE LOS REYES, MANIATANDO EN ÉSTAS Y OTRAS FORMAS A LA INQUISICIÓN, DABA TIEMPO AL JUDAÍSMO SECRETO, PARA INFILTRAERSE EN LA PROPIA INQUISICIÓN Y PARALIZAR POR DENTRO SU EFICACIA, FRACASANDO CON ELLO UN SISTEMA DEFENSIVO, QUE PUDO CORTAR EL MAL DE RAÍZ Y EVITAR LA CATÁSTROFE QUE LLEVA EL MUNDO A LA ESCLAVIZACIÓN.
(Ver El cripto-judaísmo y las herejías medievales. Los ALBIGENSES).

Extracto de: MAURICE PINAY: “La quintaesencia de las revoluciones judaicas. Ataques seculares a la tradición de la Iglesia”. Capítulo XXVIII, p. 597-612. Buenos Aires, año 1968.   

Bibliografía sumaria de primera c.

Como dijo DON FIDEL PINTO: ¡Agarrá los libros, que NO MUERDEN!

-          Bernardino LLORCA S. J., La Inquisición española incipiente. Roma. Pontificia Universidad Gregoriana. Gregorianum, año XX, 1939, vol. XX. p. 101- 142.  
-          Cardenal HERGENRÖTTER, Compendio de la Historia de la historia de la Iglesia, tomo II, sin fecha, Madrid.
-          RICARDO CAPPA S. J. La Inquisición española. Editor: D. Gregorio del Amo, MADRID, 1888 (¿?).
-          IESUS Christus, “Inquisición leyenda y realidad”, año XV, nº 95, septiembre, octubre de 2004.
-          WILLIAN THOMAS WALSH, Personajes de la Inquisición. Espasa-Calpe, Madrid, 1948.
-          MIGUEL DE LA PINTA LLORENTE, La Inquisición Española y los problemas de la cultura y de la intolerancia. Tomo II, MADRID, Ediciones Cultura Hispánica, 1958. 

SANTA MARÍA ARA COELI : SANTA MARIA ALTAR DEL CIELO

*SANTA MARIA ARA COELI*

*SANTA MARIA ALTAR DEL CIELO*

*EDITÓ: gabrielsppautasso@yahoo.com.ar DIARIO PAMPERO Cordubensis. INSTITUTO EMERITA URBANUS. Córdoba de la Nueva Andalucía, 23 de mayo del Año del Señor de 2010, DOMINGO DE PENTECOSTES. Sopla el Pampero. ¡VIVA LA PATRIA! ¡LAUS DEO TRINITARIO! ¡VIVA HISPANOAMÉRICA! Gratias agamus DOMINO DEO NOSTRO!*



2 comentarios:

Wint dijo...

Este es uno de los textos más pedorros que vi en mi vida, completamente mentiroso de principio a fin, inventa hechos, datos, es arbitrario, ignora evidencia que prueba lo contrario. Es pura ideología antisemita y delirios. No entiendo como alguien que estudio historia puede publicar este texto si no es para defenstrarlo.

Anónimo dijo...

Los anticatólicos y sus pedorros comentarios. Solange Alberro, Consuelo Maquívar y Richard Greenleaf entre otros rebaten los mitos de la Inquisición que exageran los ateos traumados con la religión y los sectaros/protestantes anticatólicos. Cuando son argumentos que disipan las mentiras y leyendas negras cobardemente esgrimen la pedorrez del comentario de arriba "ay si ay si, si no es anticatólico no vale" Bah!! intolerantes al catolicismo, fantoches.